jueves, 29 de enero de 2009

LAS MUJERES DE ARGANDA NO SUFRIRÁN LA CRISIS PORQUE EL AYUNTAMIENTO INVITA A CENAR

La Concejala supuestamente de Igualdad de Arganda está dispuesta a invitar a cenar a 700 mujeres. Paga cada asistente unos simbólicos 6 euros por un menú de más de 40. Se supone que la cena es en conmemoración del 8 de marzo pero allí no hay más ponentes ni conferenciantes que el Alcalde y ella misma. Los dos llevan años demostrando que no son expertos en el tema.
Cuando en el Consejo de la Mujer algunas asociaciones propusieron destinar ese dinero a las partidas de emergencia social, se descolgó con "que no van a ser las mujeres las que paguen la crisis". Será que su horizonte y su preocupación no llega más allá de esas 700 a las que quiere invitar a cenar.
Este despilfarro clientelista es inmoral e indecente.
Pero sin duda lo más aberrante fue la explicación colofón con que ayer la Concejala supuestamente de igualdad culminó sus justificaciones: "No podemos quitarla porque es la única vez que sus maridos les dejan salir de cena solas y ponerse falda". Será porque van con el Alcalde. Y a ella le parece tan normal...

miércoles, 28 de enero de 2009

UNA ASIGNATURA COMO OTRA CUALQUIERA

Hoy hemos conocido la decisión del Tribunal Supremo: no se puede objetar a Educación para la Ciudadanía. Es una asignatura más que recoge los valores de convivencia, ciudadanía, los derechos humanos, la constitución, la igualdad de sexos, el respeto al medio ambiente, la tolerancia,... Que enseña, en las etapas de educación obligatoria, lo que señalan la Constitución, las leyes españolas, las europeas y la declaración de derechos humanos. Contenidos que llevan décadas incluidos en las leyes y programaciones educativas de este país bien de manera transversal bien en la asignatura de ética.
Pero los objetores han anunciado ya su recurso al Constitucional y a Estrasburgo. Continuarán utilizando a sus hijos en una confrontación política con el gobierno legítimo y democrático de este país alentada por sectores reaccionarios, en especial de la iglesia católica. A ellos que tanto claman por su derecho a elegir lo mejor para sus hijos ¿no se les cae la cara de vergüenza?