Los primeros días de Julio, el Partido Socialista Obrero Español celebra su 37º Congreso Federal. Mientras otros se dedican a la polémica y la pelea, aparentemente más de cuestiones e intereses personales que ideológicas, los socialistas españoles nos reunimos y debatimos con espíritu de cambio, somos conscientes de que el cambio es la fuerza de nuestro partido y, también, de que nuestro partido es la fuerza política de los cambios en España. La reciente victoria electoral de José Luis Rodríguez Zapatero es un estímulo para que los socialistas sigamos sirviendo a la sociedad española desde la vanguardia de las ideas, para que nos mantengamos alerta frente a los nuevos problemas de nuestra sociedad y atentos a las muevas oportunidades para crecer en justicia social y en igual libertad.
Lo mejor de nuestra historia como partido es nuestro compromiso con las libertades individuales y los valores democráticos. Y nuestros mejores empeños son aquellos que se dirigen a condensar esos ideales en las vidas de la gente, aquellos esfuerzos dirigidos a plasmar nuestros valores en recursos materiales que sustenten los derechos sociales, civiles y políticos.
La mejor garantía de que los poderes públicos cumplan su función de protección y promoción de la libertad individual es la conformación democrática de sus decisiones. La participación en los procesos de reflexión y decisión, la transparencia en la información y el derecho de acceso a la misma, son factores que garantizan una mejor calidad de las decisiones de las instituciones públicas. Y si esos rasgos democráticos deben impregnar las instituciones, lo son igual para los partidos políticos como sujetos de la acción política en democracia. Lo son en este Congreso que ahora celebramos.
Tengo la satisfacción y la responsabilidad de ser delegada en este Congreso Federal. Como representante no sólo de Arganda y del Sureste, sino de los Socialistas Madrileños en este foro, plantearé junto a mis compañeros los retos y necesidades a los que debemos dar respuesta desde el Partido Socialista. Respuestas que en Madrid son urgentes y que deben evitar el deterioro de la calidad en servicios como la sanidad y la educación públicas, pilares básicos del estado del bienestar, gravemente amenazados por el gobierno popular que padecemos.
